Comisión de Asuntos Hacendarios

Recursos para educación en 2025 no terminan de convencer a diputados

La diputada Paulina Ramírez reclamó los recortes que sufrirían la educación diversificada, técnica y científica (¢10 mil millones menos), así como la enseñanza especial (¢13 mil millones menos).

Ministro de Hacienda
photo_camera El jerarca de Hacienda, Nogui Acosta (centro), debatió por primera vez con los diputados de Hacendarios sobre el Presupuesto del 2025.

El Presupuesto Ordinario de la República para 2025 fue diseñado para premiar a aquellos ministerios o entidades que han hecho una buena ejecución de su presupuesto. Así lo aseguró el ministro de Hacienda, Nogui Acosta.

En esa línea, manifestó ante los diputados de la Comisión Permanente Ordinaria de Asuntos Hacendarios de la Asamblea Legislativa que el Presupuesto tuvo 3 áreas prioritarias: la parte social (¢88.249 millones más), seguridad (¢25.731 millones más) y educación (¢22 mil millones más).

Sin embargo, los diputados le cuestionaron sobre la asignación de recursos para la educación.

La diputada del Partido Liberación Nacional (PLN), Sonia Rojas, le indicó a Acosta que la frase que dijo de que el Ministerio de Hacienda premia a quienes hacen una buena ejecución del presupuesto es mentira con respecto al Ministerio de Educación Pública (MEP).

Al mismo tiempo, manifestó que sí se recortaron los recursos para la educación pública, algo que no pueden tapar con un dedo.

“Claro que si es cierto. Claro que esto no lo podemos dejar pasar. Aquí hay una situación importantísima: son ustedes mismos los que están debilitando la educación a todos los niveles”, afirmó Rojas.

Añadió, de forma irónica, que admira la astuta y muy hábil estrategia de comunicación para seguirle mintiendo a la gente.

Acosta respondió que si se analiza el presupuesto del MEP en 2024, con y sin pago retroactivo, se evidencia que el presupuesto crece para 2025.

“Y cuando hacemos esa corrección, en lugar de lo que andan diciendo por ahí de que baja en ¢18 mil millones, en lugar de eso aumenta en ¢22 mil millones”, expresó el ministro.

El funcionario sigue defendiendo que al hacer el comparativo, se deben restar ¢40 mil millones que se usaron para aplicar un aumento salarial retroactivo a los trabajadores de la educación. Luego, poner el resultado a la par del monto asignado para 2025, y así se obtiene que hay un incremento de ¢22 mil millones. Pero, la realidad es que, en cifras absolutas, el presupuesto es menor en ¢18 mil millones.

Recortes en educación diversificada, técnica y científica; y enseñanza especial 

La también diputada del PLN y presidenta de la Comisión, Paulina Ramírez, le consultó al jerarca si ha dimensionado el impacto que podría tener el no darle prioridad al sector educación.

“Hablando de educación como un todo. Porque aquí en esta Asamblea Legislativa hemos visto como sistemáticamente, tanto educación primaria como secundaria, se ha visto debilitada”, indicó Ramírez.

Agregó que, si bien es cierto que hay recursos escasos, sí es necesario priorizar algunos temas.

Ese sentido, señaló que no cree que no pueda ser una prioridad el pensar en la educación diversificada, técnica y científica, la cual sufriría una disminución de ¢10 mil millones. Además, también mencionó la reducción de ¢13 mil millones en el caso de la enseñanza especial.

Acosta señaló que la pregunta es como generar una balanza entre educación y otros ámbitos, ya que, hay muchísimas demandas.

Sobre los colegios científicos, manifestó que en promedio tienen una ejecución que no llega al 88%, por lo que les están dando más recursos de los que en realidad necesitan.

Recursos del CAF podrían usarse para educación

El diputado del Frente Amplio (FA), Jonathan Acuña, indicó que en el Presupuesto de Hacienda como tal se incluyen recursos del Banco de Desarrollo de América Latina y Caribe, anteriormente conocido como la Corporación Andina de Fomento (CAF).

En esa línea, le consultó al ministro si los recursos del CAF que correspondían al primer desembolso de este año ya habían sido entregados. Acosta le respondió que aún no se concluía con el proceso.

Acuña manifestó que se podría detener ese proceso, esperar y utilizar esos ¢30 mil millones de colones para educación, algo que va a proponer a la Comisión.

El ministro recordó que el CAF es un compromiso que se aprobó en la Asamblea con un proceso de pago que se debe realizar cada año.

“Me preocuparía que estuviésemos renunciando a la posibilidad de tener un ente de financiamiento para el desarrollo de infraestructura pública, particularmente en las municipalidades”, señaló Acosta.