Luis Amador, exministro de Obras Públicas y Transportes, pretendía formar un nuevo partido político para buscar la presidencia de la República en las elecciones del primer domingo de febrero de 2026. Pero, la falta de dinero lo enfrentó a una dura realidad.
Entendido el punto de que sin capital no se puede poner a funcionar una agrupación política, Amador no tuvo reparo en volver sobre sus pasos pedir su adhesión al Partido Unidad Social Cristiana (PUSC).
Todo ello apenas menos de dos meses después de anunciar que participaría en la contienda presidencial del 2026, no con un partido tradicional.
No dijo nada sobre si hay algún compromiso de la dirigencia rojiazul para gestionar una reforma a los estatutos del PUSC a fin de permitirle aspirar a la candidatura pese a no tener los cuatro años de militancia que se exigen.
En un video con duración de dos minutos y 18 segundos, Amador explicó las razones de la decisión tomada.
“Me honra y me complace que dirigencia del Partido Unidad haya mostrado apertura a mis ideas y a mis planes, a mis proyectos, todos para el país. Todos para levantar aquellos ideales socialcristianos, de la Seguridad Social, en las instituciones que tan erosionadas se encuentran hoy, como la Caja del Seguro Social, la educación y la seguridad.
“Agradezco las muestras de apoyo y espero tener nuevamente la oportunidad de servir de nuevo a Costa Rica”, afirmó Amador Jiménez.
¿Volver a sus raíces?
El hecho que para la conformación de un partido nuevo se requiere cumplir con una serie de formalidades y de procesos establecidos por el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), así como el hecho de no contar con los recursos suficientes para hacerle frente a una campaña político-electoral, hicieron que Amador tuviera que dar un paso al lado e inclinarse por la agrupación política por la que, dice, siente afinidad.
“Si bien previamente manifesté que no le daría mi apoyo a ningún partido tradicional, en los últimos días he analizado, desde dónde podría aportar más al país y concluí que la mejor opción es el Partido Unidad Social Cristiana. Tengo que reconocer que fue una decisión difícil, ya que, ciertamente, me inclinaba por hacer mi propio camino”, precisó Amador.
Sostuvo que se encontró “con muchos tropiezos” y reconoció, que no cuenta con los recursos económicos necesarios para invertir en una campaña política “de altura, como ustedes merecen”.
“Reflexionando mucho sobre este tema confirmé que los ideales que me habían transmitido mi abuelo 'Pacho' Amador y tía Marina Chavarría y muchos de mis familiares eran los socialcristianos que tanto defendían ellos con quiénes pasé mi infancia y durante aquel tiempo participé de las juventudes socialcristianas en muchas de las contiendas electorales”, añadió Amador.
Dijo que esos ideales son los que más se acercan a su visión de país y a su sentir costarricense.
Detalló que si bien en la actualidad, una parte importante de la población se ha sentido decepcionada por situaciones y errores del pasado, tanto las organizaciones como las personas tienen oportunidad para mejorar y renovar.
“Con ideas novedosas, fortalecernos a partir de las experiencias. De esta forma marcamos el camino para la Costa Rica que queremos, manteniendo los principios fuertes, la institucionalidad que nos caracterizan, que nos permiten transitar hacia el desarrollo de nuestra amada patria”, puntualizó Amador.
El exfuncionario, que reside por ahora en Canadá, estuvo al frente del MOPT hasta el 12 de marzo anterior cuando, mediante una llamada telefónica el presidente de la República, Rodrigo Chaves le comunicó su destitución.
Chaves dijo ese día que la decisión la tomaba debido a que Amador permitió que se adjudicaran las obras de rehabilitación de la pista de aterrizaje del Aeropuerto Daniel Oduber, a una empresa que cobró más de $2 millones más que otras interesadas.
