Auditoría urge al ICE claridad sobre futuro de proyecto El Diquís

Preocupan “las indecisiones, contrariedades, insuficiencia en la fundamentación técnica e incertidumbre respecto del futuro del PHD -Proyecto Hidroeléctrico El Diquís-”.
La Auditoría del ICE instó a las autoridades institucionales a definir el futuro del proyecto El Diquís.
photo_camera La Auditoría del ICE instó a las autoridades institucionales a definir el futuro del proyecto El Diquís.

La Auditoría Interna del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) exige a la administración que defina, de una vez por todas, el futuro del proyecto hidroeléctrico El Diquís.

Pese a que el proyecto fue descartado del plan de expansión del ICE desde el 2018, este año, raíz de que el país estuvo al borde de un severo racionamiento eléctrico, parecería que las autoridades buscarían revivirlo.

Según el informe, se realizaron manifestaciones en esa línea. Por ello la Auditoría exige a la Gerencia de Electricidad, una actualización del Perfil de Riesgos del Proyecto Hidroeléctrico El Diquís.

La última vez que se efectuó esa actualización fue en el 2023.

A la la auditoría del ICE le preocupan “las indecisiones, contrariedades, insuficiencia en la fundamentación técnica e incertidumbre respecto del futuro del PHD -Proyecto Hidroeléctrico El Diquís-”.

“Extraña a esta Auditoría que, con vista de los hechos recientes en torno al posible racionamiento, condición extrema que develó dudas respecto de la gestión de planificación eléctrica, no se haya concretado por parte de la Gerencia de Electricidad, una actualización del Informe del Perfil Riesgos del Proyecto Hidroeléctrico El Diquís, realizado por la Dirección Planificación y Sostenibilidad en julio 2023, de conformidad con lo estipulado en el Marco Metodológico para la Valoración y Gestión de Riesgos del ICE”, detalló la Auditoría.

¿Sí o no?

El informe 0020-101-2024, dirigido al gerente de Electricidad, Verny Rojas, señala que pese a que a nivel institucional el proyecto en 2023 fue tipificado como “candidato” – que no se indica una preferencia o intención de desarrollarlo-, para este año, el presidente ejecutivo del ICE, Marco Acuña, señaló, en conferencia de prensa del 15 de mayo anterior que había posibilidad de reactivar el PH Diquís, a fin de hacerle frente a desabastos en el futuro.

El jerarca además reconoció en otras intervenciones públicas que El Diquís es un proyecto de interés y aseguró que, si se hubiera construido, le daría soporte a la demanda nacional.

En mayo pasado, el ICE alertó sobre la posibilidad de racionamientos eléctricos, producto del fuerte impacto de la época seca provocada por el Fenómeno de El Niño en cuya fase crítica, provocó una fuerte reducción de los caudales de los ríos y de los embalses.

En el ICE informaron que las reservas de los embalses alcanzaron niveles preocupantes, lo que motivó que la entidad tuviera que acudir al Mercado Eléctrico Regional (MER) a comprar de energía, así como adquirir más búnker y diésel para la generación térmica.

“En este punto, se reitera que una estrategia adecuadamente definida sobre el futuro del PHED y lo que se vislumbra para una adecuada y sostenible matriz de generación eléctrica, le permitirá al ICE tomar decisiones eficazmente y disponer una hoja de ruta para establecer objetivos estratégicos y de negocio en torno al proceso de planificación eléctrica que garanticen su despolitización y la continuidad del servicio. En ese contexto, la gestión del riesgo empresarial no crea la estrategia, pero si influye en su desarrollo”, sumó el auditor.

Del 2006 al 2016, los Planes de Expansión de la Generación (PEG) del ICE incluyeron el Proyecto Hidroeléctrico Diquís como base para la estrategia de desarrollo de la generación para el mediano y largo plazo, respaldado en las expectativas de crecimiento del país y de la demanda.

Por ello, desde el 2006 al 2018, el ICE gastó más de ¢87.925 millones en la fase de Pre inversión del proyecto que involucró, entre otros:

  • Desarrollo del Estudio de Impacto Ambiental para obtener viabilidad ambiental.
  • Investigación y diseños preliminares del proyecto.
  • Trabajos correlacionados a las concesiones mineras.
  • Abordaje e investigación social de los reasentamientos.
  • Infraestructura básica.
  • Plan de gestión específico para la Fase de Pre-Inversión.

Posteriormente, ante las presiones sociales y estudios técnicos institucionales que concluyeron que los proyectos existentes eran suficientes para enfrentar la demanda de electricidad del país, el ICE optó por desistir del plan, que se convertiría en el más grande de la institución, pues se pretendía que generara 646 Megavatios. Se ubicaría en la Zona Sur.