El pago fraudulento del marchamo, mediante tarjetas, es una práctica que se disparó en el 2023.
Datos del Instituto Nacional de Seguros (INS) apuntan que este año se detectaron 3.346 casos de fraude, mientras, en el 2022, los casos identificados ascendieron a 1.726.
Es decir, entre un año y otro, el aumento en la incidencia de este delito fue de 1.620 fraudes más, para un alza de 193,8%.
Sidney Viales, jefe de Seguros Obligatorios del INS, comentó que los casos de pago fraudulentos se dieron en el sitio web de la entidad aseguradora con tarjetas robadas o clonadas.
“Personas inescrupulosas hacen uso de una tarjeta que no les pertenece. Pagan el derecho de circulación, obtienen la documentación y luego contactan al propietario registral del vehículo y le dicen que, por error, pagaron la placa que no correspondía y que ahí tienen la documentación, que es totalmente original.
“Le dicen a la persona que necesitan que le hagan el pago en efectivo. Se ven en un lugar, acuerdan el punto, el dinero, a veces hasta descuento les hacen, entonces entregan la documentación”, explicó Viales.
Viales afirmó que, cuando el propietario de la tarjeta se da cuenta que la utilizaron sin su autorización, procede a realizar el reclamo correspondiente y el INS procede a reversar todo en el sistema.
“Para todos los efectos, esa persona que fue contactada por los estafadores se ve afectada, porque el marchamo vuelve a quedar pendiente.
“Anda con la documentación, pero el marchamo está pendiente porque se pagó con una tarjeta sin ningún tipo de autorización”, agregó Viales.
Doble autentificación
Apuntó que el Departamento de Investigación junto con la Dirección Jurídica del INS pusieron en conocimiento del Ministerio Público y del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) la información para que sigan con las investigaciones correspondientes.
Debido a que este ilícito se dio con más frecuencia en el 2023, Viales externó que, para el proceso de cobro actual se activó un esquema de doble autentificación llamado “tres d”, a nivel de seguridad.
Aseveró que lo que se pretende es mitigar los fraudes que se puedan dar en los pagos electrónicos a través del sitio web.
“Lo que estamos procurando es que la persona que usa la tarjeta sea el dueño de la tarjeta. Eso es parte de la seguridad que estamos aplicando, para garantizarle a todos nuestros clientes la tranquilidad de que puedan pagar por el sitio web de forma segura”.
