Costa Rica tiene índice de sobrepeso en niños más alto en Centroamérica

Estudio elaborado por la UNICEF Y Ministerio de Salud delata realidad
La alimentación balanceada y la actividad física son fundamentales para evitar el sobrepeso en los menores de edad. Foto CENCINAI
photo_camera La alimentación balanceada y la actividad física son fundamentales para evitar el sobrepeso en los menores de edad. Foto CENCINAI

De acuerdo con un estudio del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en Costa Rica el 31,7% de la población entre cinco y 19 años tiene sobrepeso u obesidad. Es el índice más alto de América Central.

El estudio denominado “Análisis del panorama de la situación del sobrepeso y obesidad en los niños, niñas y adolescentes en Costa Rica” se llevó a cabo en colaboración del Ministerio de Salud.

La provincia de Cartago tiene uno de los porcentajes más altos de sobrepeso y obesidad infantil y adolescente, mientras que las provincias de Guanacaste y Alajuela son las que presentan los porcentajes más bajos.

De acuerdo con UNICEF, se identifican varios factores de riesgo que contribuyen al sobrepeso y la obesidad infantil en diferentes etapas de la vida, en niños mayores de 5 años.

Un estado nutricional inadecuado de las madres y el incumplimiento de prácticas como la lactancia materna en la primera hora de vida, son factores de riesgo significativos.

Además, falta información para la toma de decisiones en esta etapa, principalmente la que se refiere al estado nutricional de la madre durante la gestación.

Mientras que en etapas posteriores destacan las dietas altas en azúcares y grasas, el comportamiento sedentario así como la exposición a la publicidad de alimentos poco saludables, como factores de riesgo importantes.

Los datos de la alimentación de los niños en la etapa de los 6 a los 12 años es escasa, lo que impide que se puedan analizar sus hábitos alimenticios y pone de relieve un problema para el país.

Con respecto a los adolescentes, la tendencia muestra que registran un alto consumo diario de bebidas azucaradas, y es muy bajo el porcentaje de jóvenes que manifiestan consumir frutas y verduras diariamente.

Se suma a los factores anteriores la ausencia de actividad física, sobre la población de 6 a 12 años, en los adolescentes. El 82 % no cumple con el nivel diario recomendado.

A esta problemática se agrega que solamente el 13,3 % de los centros preescolares, el 15,2 % de las escuelas primarias y el 47,1 % de las escuelas secundarias cuentan con espacios de juego al aire libre o un gimnasio.

 Asimismo, hay un alto porcentaje de adolescentes que pasan sentados frente a una pantalla durante varias horas en la semana, viendo televisión, jugando videojuegos o realizando otras actividades que implican estar sentado.

Cuadro del Estudio UNICEF
Cuadro del Estudio UNICEF
Cuadro del Estudio UNICEF2
Cuadro del Estudio UNICEF

En relación con las horas de sueño, la tendencia muestra que la mayoría de los adolescentes no cumple con las ocho horas diarias, ni entre semana ni en fin de semana.

Respecto al nivel socioeconómico, el sobrepeso está afectando a la población infantil y adolescente que se encuentran en el tercer y cuarto quintil; es decir, no está afectando a la población con condiciones socioeconómicas más bajas.

Hasta hace algunos años, la desnutrición infantil representaba el principal problema relacionado con el estado nutricional de los niños. Actualmente, el problema del sobrepeso coexiste con el hambre oculta, la malnutrición que amenaza la supervivencia, el crecimiento y el desarrollo de los niños y adolescentes, las economías y las naciones.

A raíz de los resultados del estudio la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) lanzó una campaña que promueve la actividad física y que busca informar sobre la necesidad y los beneficios de que los menores entre seis y 12 años realicen actividad física diariamente.

Bajo el lema: “La clave está en el movimiento”, la seguridad social implementará la estrategia durante julio, para que  los padres de familia tomen conciencia y traten que sus hijos realicen actividad física, así como promover conductas y actividades para generar acciones a futuro que coadyuven a mejorar la salud de esta población.

Los especialistas de la CCSS recomiendan que los niños deben realizar, mínimo, 60 minutos diarios de actividad física. Por eso proponen que las actividades pueden ser desde el juego hasta las del hogar.

La educadora Dinia Solano, precisó que en las escuelas también se pueden fomentar las actividades físicas, con las pausas activas dentro de aula, que también ayudará a mejorar la concentración en los estudiantes.

Diego Delgado, educador físico de la CCSS, explicó que la actividad física puede realizarse en el hogar, que además ayuda a fortalecer las relaciones familiares. Tal es el caso de tareas como lavar el carro, limpiar el patio y hasta salir a caminar con el perro.

La actividad física ayuda a:

  • Desarrollar habilidades motrices básicas como el equilibrio, la fuerza, la velocidad, la flexibilidad y la propiocepción.
  • Fortalecer los músculos y reducir la presión arterial.
  • La autoconfianza, la interacción social y la integración.
  • Marcar metas, a superar retos y a trabajar en equipo.
  • Reducir las probabilidades de sufrir enfermedades mentales como la depresión.
  • Afrontar desafíos físicos y emocionales.
  • Explicar y comprender el entorno más cercano.
  • La audición.