El abogado Constitucionalista Manrique Jiménez considera que, la extradición de nacionales no es un asunto de derechos humanos, y advirtió que si fuera diferente, muchos países de América Latina no podrían aplicarlo.
Para Jiménez, quien habló ante una Comisión Especial de la Asamblea Legislativa que analiza un proyecto de reforma constitucional en esa dirección. Sostuvo que hasta el momento la Corte Interamericana de Derechos Humanos no se ha pronunciado en contra de la realización de este acto por parte de otros países adscritos a la Convención Americana de los Derechos Humanos.
Según el abogado constitucionalista, a pesar de no ser un derecho humano, la extradición si conlleva una serie de principios; entre ellos el derecho a la prescripción o que el delito sea penado en ambos países.
Ante la variedad de criterios sobre si es o no un tema de derechos humanos, la diputada oficialista Pilar Cisneros le consultó su posición en torno al tema de si la extradición de nacionales se puede introducir vía una reforma parcial a la Constitución Política o se requiere una Asamblea Constituyente..
Jiménez expresó que al no ser un tema de derechos humano, la extradición es un instrumento que puede decidir el Congreso, porque además es un instrumento de derecho internacional para facilitar la relación entre estados en la persecución de delitos de transcendencia.
Añadió que es importante que el mecanismo esté sustentado en los convenios internacionales, ya que al no tenerlo se quita el instrumento fundamental de la relación entre los estados regida en el derecho internacional
Jiménez cerró mencionando que “si se va a hacer una reforma hay que cumplir con la técnica del derecho internacional, que por excelencia son los tratados y convenios a lo que se suma la costumbre, que es una fuente del derecho internacional”.
