MOPT aún no tiene diseños finales para ampliación de ruta 32

Ministro descarta obras complementarias que requiere el proyecto, y reafirma que el objetivo es terminar o terminar la ampliación.
Según manifestó Mauricio Batalla, jerarca del MOPT la única forma de terminar la ruta 32 es mediante las rotondas, trabajos que se harán dentro del derecho de vía. Foto: Krissia Morris Gray.
photo_camera Según Mauricio Batalla, jerarca del MOPT la única forma de terminar la ruta 32 es mediante las rotondas, trabajos que se harán dentro del derecho de vía. Foto: Krissia Morris Gray.

El ministro de Obras Públicas y Transportes, Mauricio Batalla confirmó que la entidad aún no dispone de los planos finales para la ampliación de la Ruta 32, entre el cruce de Río Frío, en Sarapiquí, y Moín, en Limón.

Ello, pese a que la semana pasada él mismo informó que las obras terminarían en abril del próximo año, conforme con lo resuelto en la negociación que se hizo con el Eximbank, de China, para ampliar el plazo de ejecución del crédito con que se financió el proyecto.

Batalla reiteró lo que ya había dicho desde inicios de año en la Asamblea Legislativa: que con el objetivo de terminar los trabajos de ampliación de la ruta 32, se optó por no hacer las expropiaciones que estaban pendientes. Se trabajará dentro del derecho de vía del Estado a lo largo de la ruta.

En entrevista con www.despertar.cr, el ministro indicó que se mantienen trabajando en los cambios en los diseños “para que no haya ni una sola expropiación”.

“Para que, si faltaban 179, si faltaban 200 o si faltaban 100 no haya ninguna. Ajustarnos al derecho de vía correspondiente”, afirmó Batalla.

Y agregó: “vamos a estarnos metiendo dentro del derecho de vía todas las expropiaciones que ya se habían pedido y se quiera desestimar porque sino no vamos a terminar la carretera nunca”.

Para el desarrollo de los trabajos, se identificaron que se requerirían 600 expropiaciones y 5 años después sólo se habían realizado un 50%. De los que quedan, alrededor del 40% se encuentran en procesos judiciales.

“Lo que estamos haciendo en metiéndolo todo en el derecho de vía para poder terminar la carretera, porque la gente de Limón ya está cansada, porque ya son seis o siete años de construcción y nada que se termina.

“La manera de terminarla es, en vez de pasos a desnivel que son unos túneles por debajo de la carretera, hacer obras a través de pasos de nivel de rotondas, donde nos va a ayudar a mejorar la seguridad vial (…) pero sobre todo generará la conectividad que hoy no la hay”, reafirmó Batalla.

Se le consultó si producto de las modificaciones en esos tramos habría cuellos de botella. Respondió que no, porque con el derecho de vía existente, en ambos lados de la vía, siempre se concretará la carretera a cuatro carriles.

Pese a que en su gestión no se han resuelto los problemas, Batalla criticó que el proyecto estuvo mal diseñado desde el principio, pues sólo tenía un 5% de aceras, 5% de ciclovías y lo calificó como “un diseño mal conceptualizado, que no previó la seguridad vial”.

Y pese a que no se cambió el trazado de la ruta, el ministro añadió como parte de su crítica que se cortan 64 comunidades a la mitad, las escuelas de un lado y las viviendas al otro lado, 20 puentes para 104 kilómetros de carretera. Los trabajos los seguirá haciendo la empresa China Harbour Engineering Company (CHEC).

Los trabajos pendientes se harán con los dineros aprobados por el Eximbank que, tras conocer los planes del MOPT aceptó ampliar el plazo del crédito a abril del 2025. Serán $40 millones, por lo que en total se llegará a $465 millones. Eso, además de la contra partida del Gobierno.

De acuerdo con Batalla, al no ser un crédito adicional, no se requiere de una adenda para el uso de los recursos pendientes.

No es suficiente

El derecho de vía es la franja longitudinal que le pertenece al Estado. Y después de las críticas que hizo, Batalla reconoció que eso no será suficiente para terminar la construcción, pues faltarán obras como aceras, ciclovías, más puentes peatonales y pasos a desnivel; es decir, las mismas obras por cuya ausencia hizo sus señalamientos.

Justificó que no se cuenta con los recursos económicos para hacerle frente a las obras complementarias y tampoco tiene autorización de la Contraloría General de la República (CGR) para contemplarlas, toda vez que no estaban en el contrato inicial.

Para eso, dijo que se deben buscar los dineros para los estudios de factibilidad, para lo cual se está en conversaciones con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE). Eso sí, pretende pedir una fondos no reembolsables para ello.

Agregó que se deberá sacar una nueva licitación internacional para hacerle frente a las nuevas obras, pero no estarían para el final de la presente administración.

“La carretera va a estar funcional. Va a conectar Río Frío con Limón, eso es un compromiso de esta administración. Antes de que nosotros nos vayamos, la carretera va a estar completa a cuatro carriles desde Río Frío a Limón (…) Lo que hay que hacer después es mejorar la carretera”, agregó.

Sólo mediante rotondas

Batalla defendió que el uso de las rotondas en varias intersecciones, porque desde el punto de vista técnico, es la única alternativa para poder usar el derecho de vía, sin ir a las expropiaciones “porque sino la carretera nunca la íbamos a terminar (…) Era la opción técnica, necesaria para poder darle continuidad a una carretera desde Río Frío a Limón”.

Se instalarán 10 rotondas en el tramo comprendido entre La Unión hasta Moín. Dijo que los retornos y rotondas que se harán serán a cuatro vías y lo que existen son carriles sobreanchos

En cuanto a las retornos se le consultó si están bien ubicados, a lo que recalcó que “es difícil quedarle bien a todo mundo. Están ubicados donde técnicamente tienen que estar ubicados, donde así se habían establecido en el diseño original. Están ubicados donde tenemos las expropiaciones, están ubicados donde le sirva a la mayoría. No le podemos quedar bien al 100% de la gente”.