Pese a que el país cuenta con un Sistema Nacional de Salud (SNS), liderado por el Ministerio de Salud, cuyo objetivo es determinar y ejecutar acciones para la promoción de la salud de la población, este falla en el cumplimiento de ese propósito.
A criterio de la Contraloría General de la República, el funcionamiento del SNS para la promoción de la salud en la población es ineficaz, debido, entre otros factores a la ausencia de la rectoría política y técnica del Ministerio de Salud para integrar el enfoque de promoción de la salud en la política pública e institucional de los actores sociales integrantes de este sistema.
El SNS está conformado por 236 instituciones sociales entre los que se encuentran el Ministerio de Salud, que coordina y articula las acciones, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), el Instituto Nacional de Seguros (INS), el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), universidades, municipalidades y servicios médicos privados.
Manuel Corrales, gerente de fiscalización para Desarrollo del Bienestar Social, de la CGR sostuvo que tras la auditoría se encontraron debilidades como que “se adolece de una orientación rectora acerca del enfoque que requiere impulsar el país en este tema de promoción de la salud”.
A esto agregó que se detectaron debilidades relacionadas a la definición y prioridades de abordaje de la promoción de la salud para la población en vulnerabilidad.
“Hay falta de articulación entre los actores vinculados en el sistema ya que, por ejemplo, se determinó que un 51% de los actores señaló que no han recibido una orientación general por parte del Ministerio de Salud en relación con este tema, que les permita incorporar dentro de su planificación institucional la promoción de la salud”, reafirmó Corrales.
Entre los hallazgos
De acuerdo con el informe de la CGR, de 277 acciones identificadas, el 83% se incluyó en los instrumentos de planificación institucional por iniciativa de cada entidad participante antes que, por alguna orientación rectora del Ministerio de Salud, y solo el 20% de éstas recibió seguimiento por parte de ese Ministerio.
Además, resalta el documento que:
- El 50% de los actores sociales considera necesaria la incorporación explícita del enfoque de promoción de la salud en el Reglamento General del Sistema Nacional de Salud.
- Para el 90% es necesario precisar las instancias de coordinación específicas para planificar y ejecutar acciones de promoción de la salud.
- El 88% reconoce tener responsabilidades para planificar y ejecutar acciones, pero sólo el 51% recibió alguna orientación general del Ministerio de Salud, mediante directriz o lineamiento, para incorporar acciones de promoción de la salud en la planificación institucional, mientras que un 40% indicó haber recibido alguna guía para incluir poblaciones en condición de vulnerabilidad (PCV) en esas iniciativas.
- Sólo el 4% de los actores sociales confirma haber recibido alguna orientación para integrar la promoción a la salud en sus políticas, y solo el 1% logra referenciar al menos un instrumento guía emitido por ese Ministerio.
- 94% de los actores considera necesaria la incorporación de la promoción de la salud en las políticas públicas e institucionales que emiten, a partir de la orientación rectora del Ministerio de Salud.
- 62% de los actores sociales del SNS, señaló que la promoción de la salud debería ser una prioridad país y del SNS. Sin embargo, su aparición en la agenda nacional ha sido reactiva.
Prioridad país
Entre las conclusiones emitidas por la CGR está que es necesario que el Ministerio de Salud impulse acciones tendientes a fortalecer la coordinación y articulación de acciones entre los actores sociales a fin de facilitar la adopción de estilos de vida saludable que incluya a poblaciones en condición de vulnerabilidad.
Además que “…resulta necesario posicionar la promoción de la salud como una prioridad del país y del sistema en el corto, mediano y largo plazo.
"La promoción de cambios en los factores sociales, ambientales y económicos, reducen los riesgos de enfermedades crónicas, fomentan el bienestar mental y emocional, fortalecen los vínculos comunitarios y mejora la calidad de vida en general. Esto, a su vez, disminuye la presión sobre los servicios de atención de enfermedades y rehabilitación del Sistema de Salud, permitiendo una asignación más eficiente de los recursos”, concluye la CGR.
La CGR definió una serie de disposiciones a la ministra de Salud, Mary Munive para que cumpla con su rol de rectora del Sistema Nacional de Salud, las cuales se deberán desarrollar e implementar entre el 2024 y el 2025.
Sobre el informe se le solicitó una opinión a la ministra Munive. Pero, al cierre de esta nota, la petición no había sido atendida.
