La misión del Fondo Monetario Internacional (FMI), finalizó su visita a suelo nacional para supervisar la progresión de sus programas, Servicio Ampliado del FMI (SAF) y Servicio de Resiliencia y Sostenibilidad (SRS).
Estos planes fueron sometidos a su quinta y segunda revisión respectivamente.
Tras la concluir la visita que tuvo una duración de dos semanas y dar a conocer sus observaciones, la comitiva del FMI deberá transmitir su informe a la Junta Directiva para que esta apruebe los siguientes desembolsos.
De ser todo positivo como se espera, nuestro país recibiría más de $700 millones como parte de estos programas, distribuyéndose en $271 millones del SAF y $485 millones del SRS.
El Ministro de Hacienda, Nogui Acosta, dijo sentirse muy satisfecho ya que, es un reconocimiento al gobierno y el entendimiento de la dinámica con el FMI.
“La verdad muy satisfecho, muy satisfecho porque es un reconocimiento del esfuerzo que ha venido haciendo el gobierno a lo largo de estos años y no es solamente esta administración, sino, un proceso en donde hemos entendido la dinámica del acuerdo con el Fondo y es cumplir con una serie de hitos.”: Nogui Acosta.
El Ministro también señaló que es fundamental mantener el dedo sobre el reglón en la parte fiscal y profundizar en la resiliencia y la economía en el cambio climático.
El jefe de la misión del FMI, Ding Ding, declaró que Costa Rica mostró un buen y ¨fuerte¨ porcentaje en el cumplimiento de las metas pactadas para la revisión.
Encaminados al objetivo
La reforma tributaria del 2018 y la contención de gastos han sido exitosas para reducir la carga de la deuda pública.
Una de las conclusiones de la comitiva del FMI es que el superávit acumulado hasta septiembre, que fue del 1,7% del PIB, va encaminado a superar el objetivo fijado para finales de 2023.
La misión espera que la actual contención de gasto siga impulsando la consolidación fiscal y reduciendo la carga de los intereses.
Política monetaria neutral en 2024
El Banco Central de Costa Rica (BCCR), redujo de manera adecuada la tasa de interés de política monetaria y debe seguir normalizándola para así garantizar que la inflación avance de buena manera hacía las metas establecidas, conforme con los términos del acuerdo con el FMI.
Además, durante los últimos 4 meses la inflación ha sido negativa, como consecuencia del descenso mundial en el precio de las materias primas y el fortalecimiento de la moneda nacional.
Según la previsión de la evolución de la economía por parte del FMI, la política monetaria debería volver a situarse en una posición neutral a mediados de 2024.
La comitiva del FMI también señala que tener un mercado de divisas más profundo y una mayor flexibilidad del tipo de cambio reforzarían la transmisión de la política monetaria a la actividad y la inflación.
Consideran que sería útil introducir nuevas reformas institucionales y técnicas con el fin de mejorar el funcionamiento del mercado de divisas y reforzar la capacidad de los participantes del mercado para gestionar los riesgos cambiarios.
Por otro lado, indicaron que el sistema bancario nacional parece resiliente a choques adversos y las reformas programadas mejorarán la supervisión financiera.
Los indicadores de capital y liquidez son holgados y las provisiones son adecuadas, aunque la elevada dolarización genera vulnerabilidades
Además, se aprobó la incorporación de riesgos socioambientales y de cambio climático en las evaluaciones de la cartera de crédito.
Finalmente, la misión del FMI señala que se espera una moderación de 3,5% en el crecimiento del PIB para el 2024.
A pesar de que durante este 2023 se situé en torno a 5%, impulsado por el dinamismo de las exportaciones y la recuperación de la demanda interna.
