El poder acceder a la educación es un privilegio que muchas veces no se valora. Pero, la falta de ella a la larga representa una dificultad para tener una mejor condición de vida.
Prueba de ello es que este es uno de los principales factores que predomina en las personas que viven en situación de pobreza.
La educación promedio de un ciudadano mayor a 15 años en condición de pobreza es de primaria completa (6 años), una diferencia escolar de 4 años en relación con las personas que no lo están, cuyo promedio es de 10 años.
Así se desprende de la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho) julio 2023, a cargo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) de Costa Rica.
Otra brecha sumamente marcada es la de no haber asistido a la educación regular entre las personas de 13 y 17 años.
En los hogares pobres de nuestro país el porcentaje de personas en este rango de edad que son afectadas por ese factor es de 12,7%, mientras que solo un 4,1% entre quienes no se consideran en situación de pobreza.
Por otro lado, la cantidad de personas que sufren rezago escolar entre los 7 y 17 años en los sectores pobres se tasa en 25,7%, una diferencia de 17,6% en comparación al otro sector de la población.
Todos estos factores se trasladan al campo laboral. El desempleo en los hogares en pobreza es 5.1 veces más alto que en las viviendas fuera del rango de pobreza.
El informe del INEC señala que existen un 82% de ciudadanos en condición de pobreza que tienen un empleo informal, una diferencia de 52% si se compara con quienes viven la situación contraria, cuyo porcentaje es de 30%.
El ingreso per cápita de los hogares por encima de la línea de pobreza en nuestro país es 8 veces más alto respecto al de los que se consideran en situación de pobreza.
Viviendas deterioradas y hacinadas
Con relación al tema de las casas, en nuestro país las personas en condición de pobreza suelen tener viviendas deficientes en su estructura y con hacinamiento.
El estudio señala que un 84,1% de los hogares en condición de pobreza se encuentran en un estado estructural regular o malo. Además, en el 10,7%de ellos hay hacinamiento por dormitorio.
De alguna forma, esto se entrelaza con el faltante de agua que sufren un 12,8% de los hogares en pobreza. Cabe destacar que, de este porcentaje la mayoría son viviendas de zonas rurales.
Entre las características que se presentan en los hogares en términos de pobreza destaca el hecho de que suelen tener más miembros de cinco o menos años con relación a los que están por encima de la línea de pobreza.
También el 46,1% son encabezados por una mujer, mientras en los que no se vive esta situación un 41%.
El internet y los servicios de salud son otros rubros a los que a este tipo de población se le dificulta acceder.
