Más de 312.000 personas optan por no buscar empleo

Mercado laboral no regresa aún a los niveles previos a la pandemia

“Una de las hipótesis es que parte de esta población informal es la que se ha salido, ha sido excluida. Aquí tenemos personas de 50 años o más o mujeres en edad laboral activa de 35 a 50 años que no trabajan por responsabilidades familiares”, puntualizó Natalia Morales, investigadora del proyecto Estado de la Nación
15/08/2016 Avenida Central calle 4y 6 en la entrada al Mercado Central /IeCR
photo_camera Miles de mujeres laboran en le sector informal, el cual, luego de la pandemia no ha logrado repuntar a los niveles que tenía en el 2019. Foto: Ojo por Ojo.

Pese a que la tasa de desempleo disminuyó y se ubica en un 8,1%, lo cierto del caso es que eso no se traduce en mejores oportunidades de trabajo para la población. De hecho, hay una creciente tendencia de que más personas opten por quedar fuera de la fuerza laboral

Esta es una de las consideraciones del Informe Estado de la Nación 2023 que resalta las condiciones desiguales del mercado laboral y la mala calidad de los empleos disponibles, aspectos que desalientan a algunas personas que están sin trabajo.

La investigadora Natalia Monge Aguilar, del Programa Estado de la Nación (PEN) enfatizó que el mercado laboral excluye a amplios segmentos de la población.

“La pandemia generó una importante destrucción de empleo que a partir del 2021 y sobre todo el 2022 tuvimos un rebote de generación neta positiva de puestos de trabajo. Esta situación cambió en este 2023 y lo que tenemos más bien es menos personas trabajando y, además una caída aún mayor de la fuerza de trabajo”, afirmó Monge.

Según explicó la investigadora del PEN, esta situación estaría invisibilizando los resultados negativos del mercado laboral, porque “la tasa del desempleo de 8%, una de las más bajas de los últimos 15 años, no se ha traducido en más puestos de trabajo, sino que, más bien, es un reflejo del aumento en las tasas de no participación laboral, es decir, las personas que no están trabajando y que no desean trabajar”.

Formal o Informal ¿quién salió?

La experta indicó que en el país hay menos personas empleadas en el 2023 de las que había en el 2019 y que en ese plazo, se dio un incremento de desertores en la búsqueda de trabajo, pues la cifra pasó de 1.474.000 a 1.787.000, respectivamente, para un aumento en más de 312.000 personas que no buscan trabajo.

Monge añadió que los efectos de la pandemia fueron menores en el empleo formal que en el informal, pues el primero se recuperó de una manera más rápida.

En este sentido, comentó que en la actualidad hay un 10% más de empleo formal con respecto a lo que había antes de la pandemia, pero que el empleo informal tuvo una destrucción importante.

“Nunca se recuperó y, además, en este 2023 ha caído y lo que hemos visto es que esto se ha acompañado de ese crecimiento de las personas que no trabajan ni desean trabajar.

“Una de las hipótesis es que parte de esta población informal es la que se ha salido, ha sido excluida. Aquí tenemos personas de 50 años o más o mujeres en edad laboral activa de 35 a 50 años que no trabajan por responsabilidades familiares”, puntualizó Morales.

Recrudecimiento de la crisis laboral

El estudio señala que desde el 2016 el país registra una tasa creciente y sostenida de exclusión laboral, situación que afecta más a las mujeres.

“A partir de ese año, el crecimiento económico del país empezó a mostrar debilidades para crear de forma sostenida y creciente oportunidades laborales equitativas”, se indica en el informe.

Al mismo tiempo, resalta el hecho de que aumentó la cantidad de personas de 60 años que dejaron de buscar trabajo, entre el 2019 y el 2023, al pasar de 39% al 44% respectivamente. Algunas salieron por jubilación, sí, pero otras lo hicieron por las condiciones desiguales que presenta el mercado laboral.

Por otro lado, el Informe llama la atención que “en este recrudecido mercado laboral pos-pandemia, las autoridades continúan sin definir una Política Nacional de Empleo con enfoque de género, territorial y etario, que trascienda los gobiernos y que ayude a generar fuentes de empleos de calidad para toda la población”.

Uno de los desafío más fuertes que enfrenta el mercado laboral costarricense en la actualidad, según explicó Morales, es la existencia de serias barreras para acceder a una vida digna, aspecto clave en el desarrollo humano.