La llegada de la industria de semiconductores representa un reto para el país no solo por un tema de velocidad, sino también de articulación para abordar una ventana de inversión corta, en criterio de la gerente general de la Promotora de Comercio Exterior (PROCOMER), Laura López.
Ello implica juntar muchas variables como la educación, la infraestructura, la energía, el apoyo comercial o la sostenibilidad, siendo este último un tema importante para la industria de los semiconductores, principalmente en la parte energética.
“Entonces, ¿Cómo articulamos todas estas acciones de manera muy acelerada para tomar esta oportunidad?”, se preguntó López.
Entonces, dijo que, que existe la capacidad de hacerlo, tal y como se hizo cuando vino por primera vez INTEL o se empezó el clúster de dispositivos médicos. Ambos escenarios con condiciones menos favorables de las que se tienen ahora.
Sacar ventaja frente a los otros países de la región
Otro de los señalamientos que realizó la gerente de PROCOMER fue que para abordar el tema de los semiconductores también se debe aprovechar lo que diferencia al país del resto en la región.
Detalló que la tendencia del "nearshoring" está dando la oportunidad de capturar producción que está en otras latitudes y busca venir a este lado del mundo.
Sin embargo, eso genera dos preguntas: ¿Cómo la capturamos? y ¿Cómo la capturamos con las ventajas que tiene el país?
En esa línea, López apuntó que entre las ventajas que se manejan a nivel local está el hecho de contar con empresas del sector o tener un clúster consolidado desde hace años en los dispositivos médicos.
Sobre el segundo punto, indicó que eso prueba la valía que tiene el país para incorporarse en procesos productivos altamente complejos.
“Es decir, tenemos ya la experiencia en este tipo de cadenas. Y por supuesto la cercanía que tenemos con socios comerciales de hace muchos años, con los que tenemos un proceso comercial estable y robusto, que es parte del interés de estas empresas en colocarse en Costa Rica”, explicó la gerente de PROCOMER.
Agregó que, otro punto a favor es que ambas industrias tienen proveedores muy similares.
