La impunidad que prevalece sobre algunos comercios incentiva a otros actores a incumplir la normativa, creando un entorno de competencia desleal y riesgoso, afirmó Alonso Elizondo, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Costa Rica (CCCR).
“Ante esta realidad, consideramos necesario que se planteen acciones de política pública específicas para esta forma de comercio que conlleva un alto nivel de incumplimiento”, expresó Elizondo.
Elizondo sostuvo que la Cámara ha insistido que los incumplimientos en los comercios de tipo outlet son la norma, algo que confirmó un reciente operativo del Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC).
En la CCCR consideran positivo que se esté atendiendo la problemática de estos comercios. Sin embargo, instan a las autoridades a intensificar las labores de fiscalización y control que permitan abordar el problema de forma más efectiva.
Elizondo insistió en la necesidad de restaurar las buenas prácticas comerciales, adoptando acciones de política pública específicas y rigurosas para controlar a estos comercios.
Además, la organización apuntó que el operativo de esta semana logró confirmar algo que desde la entidad vienen denunciando hace un año y medio respecto a ese tipo de tiendas.
Cantidad poco significativa
En lo que va del presente año la Dirección General de Aduanas (DGA) ha decomisado 70.000 kilos de mercancías producto de sus acciones.
No obstante, en la CCCR señalaron que, aunque los números absolutos parezcan elevados, esa cifra representa una cantidad poco significativa dentro de los grandes volúmenes de importación de los outlet.
Añadieron que la intervención de la DGA debería ser el centro de la discusión, ya que, la raíz del problema es la importación irregular de mercancías, con declaraciones que omiten incluir productos sujetos a notas técnicas y con valores de importación que no reflejan el verdadero valor aduanero.
Por otro lado, en lo que respecta a las verificaciones realizadas por el Ministerio de Salud, desde la CCCR indicaron estar preocupados por el riesgo a la salud pública.
Añadieron que, el decomiso de 1.700 productos de interés sanitario en 18 locales es un reflejo de que diariamente se comercializan volúmenes elevados de mercancías peligrosas para la salud de la población y que pasan desapercibidas por las autoridades.
