Plan del CONAVI y del MOPT es terminar la Ruta 32 en un "tiempo adecuado"
Después de seis años de batallar con la ampliación de la Ruta 32 en el tramo entre el cruce a Río Frío y la intersección a Moín, el Consejo Nacional de Vialidad y el Ministerio de Obras Públicas y Transportes se han planteado terminar el proyecto a como de lugar.
El director del CONAVI, Mauricio Batalla explicó que el objetivo es “terminar lo que ya está bien, mal, regular. Hay que terminar lo que ya está. Entonces tenemos que unir Río Frío con Limón".
De allí la decisión de eliminar al menos 11 de los 14 pasos a desnivel que contempla el diseño original del proyecto, y sustituirlos por rotondas, criterio que planteó desde hace varios meses el ministro de Obras Públicas y Transportes, Luis Amador.
Amador detalló que se tomaron en cuenta aspectos como el “congestionamiento actual y futuro que se va a dar por comercio, uso de suelo, industrias y zonas francas, residenciales futuros y actual y es allí donde se analiza si se necesita el paso a desnivel o puede pasarse, temporalmente, a una rotonda y a futuro, con un préstamo hacerle un ‘up-grade’ y en el paso de los años -10 años-, se logre un nivel de tránsito que lo amerite”.
Al respecto, Mauricio Batalla sostuvo que, hace 6 años cuando arrancaron las obras, se necesitaban 600 expropiaciones y en la actualidad están pendientes entre 282 y 300 expropiaciones.
En promedio, por año, se logran concretar únicamente 50 expropiaciones, de allí que recalcó la necesidad de hacer el reajuste al diseño para terminar en el nuevo plazo.
“¿Y cómo terminamos lo que ya está con 300 expropiaciones? Hay que rediseñar un poquito el proyecto. (…) Se hizo un estudio funcional y se determinó que la única manera de terminar el proyecto en un tiempo adecuado, llámese 2024 es eliminando y generando, inicialmente, o dejando para una segunda parte todo lo que son nodos de conexión, llámese todos esos pasos a desnivel”, explicó Batalla.
Para el ministro y el CONAVI las rotondas constituyen la mejor opción para tener “prácticamente terminada” la ampliación y rehabilitación en diciembre del 2024, pues se estima alcanzar, para esa fecha, un avance del alrededor del 95%.
Por lo menos en esos términos lo explicó Batalla cuando compareció ante una comisión de la Asamblea Legislativa la semana pasada.
El ministro Luis Amador defendió que las rotondas serán temporales y que se trata de opciones que cuentan con estudios funcionales.
Amador reconoció, ante la Comisión Caribe de la Asamblea Legislativa,, que faltarán recursos para terminar las obras. Y detalló que las rotondas tienen un costo que ronda los $700 mil cada una.
En todo caso, se estima que serán alrededor de $20 millones los que harán falta si se mantienen los diseños originales del proyecto.
Indicó que las rotondas se ubicarán en La Unión, Jiménez, La Herediana, Siquirres, Bataán, Matina, la intersección hacia la Terminal de Contenedores de Moín (TCM) y Moín.