Tipo de cambio actual es un golpe a la estabilidad y la generación de empleo

La industria alimentaria se une al llamado que gran parte del sector productivo ha hecho a las autoridades del Banco Central. Foto: CACIA.

El Vicepresidente de la Cámara de la Industria Alimentaria, Mario Montero, indicó que en 2022 y buena parte del 2023, las enormes fluctuaciones generaron mucha incertidumbre en la cadena de producción, lo cual nunca es un síntoma positivo en la economía.

La Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (CACIA), volvió a llamar la atención sobre el impacto del tipo de cambio del dólar en el sector productivo. Consideran que este es un tema que amerita una mirada mucho más cuidadosa por parte de las autoridades monetarias del país.

Los empresarios del sector califican la situación que se vive con el tipo de cambio actual como un serio golpe a la estabilidad de uno de los motores más importantes de la economía y la generación de empleo.

El Presidente de la Cámara, Juan Ignacio Pérez, comentó que la industria alimentaria es el tercer sector más importante a nivel exportador, por lo que la estabilidad financiera de las ventas al exterior es determinante para mantener una economía sana.

“Cuando las ventas al exterior tienen un peso importante en lo que se produce nacionalmente y ese valor se desploma en períodos muy cortos, la estabilidad financiera de las empresas se pone en riesgo y eso se traslada a la economía interna sobre factores como la destrucción o incapacidad de generar nuevos puestos de empleo, incertidumbre para proyectar escenarios de crecimiento o inversión de maquinaria, equipo y tecnologías.”, explicó Pérez.

Y agregó que, si a esto se le suma la realidad de los costos de producción crecientes en mano de obra y energía, se vuelve imposible pronosticar una mejora en la capacidad de compra del consumidor nacional.

Por su parte, el Vicepresidente de CACIA, Mario Montero, indicó que en 2022 y buena parte del 2023, las enormes fluctuaciones generaron mucha incertidumbre en la cadena de producción, lo cual nunca es un síntoma positivo en la economía.

Montero añadió que, durante el segundo semestre del 2023 se observó cierta estabilidad, la cual se perdió durante las últimas semanas cuando el tipo de cambio retomó su tendencia a la baja.

“Esos impactos los sufrimos todos, no solo el exportador o el empresario turístico”, aseveró Montero.

Por último, la industria alimentaria se une al llamado que gran parte del sector productivo ha hecho a la Presidencia Ejecutiva y miembros de la Junta Directiva del Banco Central de Costa Rica (BCCR).

Esto para que tomen las medidas necesarias de manera inmediata, que garanticen la estabilidad en el corto, mediano y largo plazo, lo cual es la responsabilidad de las autoridades monetarias.