Considera economista

País vive un problema ético de injusticia social

La sociedad costarricense se empobrece aceleradamente, considera el economista Welmer Ramos. Foto: UCR.

Para Welmer Ramos no es socialmente aceptable que los grupos económicos más pudientes tengan una posición de privilegio en lo tributario, ya que, son los que más se benefician de la infraestructura pública, educación y de los servicios públicos en general.

Mientras la riqueza que genera el país aumenta, la sociedad costarricense se empobrece aceleradamente, señaló el economista Welmer Ramos. Considera que se vive un serio problema ético de injusticia social que ya no se puede disimular.

“Y los líderes políticos de turno optan por no discutirlo siquiera. Lo toman como si fuera una consecuencia inevitable del destino”, afirmó Ramos.

En esa línea, apuntó que los impuestos son altos para las Pymes, para los empleados y para los que trabajan por cuenta propia.

“El ciudadano paga impuestos cuando compra, por el salario que percibe, por las viviendas y los bienes inmuebles, por el combustible que utiliza, entre otros pagos”, manifestó Ramos.

Añadió que, sin embargo, no es igual para “cierta élite” que disfruta de exoneraciones plenas creadas por leyes.

Por otra parte, el economista apuntó que, mientras las autoridades políticas señalan con “bombos y platillos”, que la producción crece, que la inversión extranjera rompe récords y las exportaciones siguen dinámicas, el Ministerio de Hacienda anuncia que la recaudación fiscal disminuye y que recortará más dinero para arreglar vías públicas, para salud de la población, para la educación, para los Cen-CINAI, para la Red de Cuido, entre otros.

Cae la recaudación de las personas jurídicas

Sobre la caída en la recaudación tributaria, Ramos indicó que al revisar las estadísticas todos los rubros de cobro de impuestos suben, mientras que el que disminuye bruscamente es el Impuesto a los Ingresos y Utilidades, que presenta una caída de ¢79.579 millones al compararse el acumulado a mayo del 2024 con el mismo período del 2023.

“Pero en ese reglón se recogen los impuestos al salario, ganancias de las personas que trabajan por cuenta propia (emprendimientos), ganancias de las Pymes y las ganancias de grandes empresas”, detalló el economista.

Agregó que, al desglosarlo se puede apreciar que los impuestos a los ingresos y utilidades de personas físicas crecen.

En contraparte, en los impuestos a las ganancias de las personas jurídicas es donde la recaudación disminuye en ¢105.031 millones en los primeros 5 meses del presente año.

“Y más aún, si entráramos con más detalle, son las grandes empresas las que están pagando menos -no son las Pymes- a pesar de que crecen sus utilidades”, afirmó Ramos.

Para el economista ese resultado es consecuencia de que ha habido un fortalecimiento legal de los mecanismos para eludir impuestos, un deterioro significativo en la gestión tributaria y aduanera, así como una mayor laxitud para que las empresas grandes que están en el Régimen Definitivo se trasladen al régimen exonerado (Régimen Especial o de Zona Franca).

Añadió que, hay una serie de leyes aprobadas por la Asamblea Legislativa que abren portillos a la elusión y exoneración tributaria de grandes empresas. Mencionó 3 ejemplos:

Fuente: Economista Welmer Ramos.

Urge encarar la situación

Para Ramos no es socialmente aceptable que los grupos económicos más pudientes tengan una posición de privilegio en lo tributario, ya que, son los que más se benefician de la infraestructura pública, educación y de los servicios públicos en general.

Sin embargo, considera que, eso ha ido tomando una posición cada vez más “parasitaria” en cuanto a la vida del Estado.

“Los Tres Poderes de la República deben encarar con urgencia esta situación de crisis en las finanzas públicas y formar una comisión para resolver esta aberración. Hay que encontrarle una salida al absurdo creado a través de las políticas públicas desafortunadas desde hace bastante tiempo para acá”, concluyó Ramos.