Declarada inviable

Financiera Desyfin corrió con la misma suerte de Coopeservidores

La interventora Marianne Kött dio a conocer el informe final de la intervención en Financiera Desyfin. Foto: Brandon Esquivel.

Las personas con depósitos garantizados y no garantizados en la Financiera son 4.028, de las cuales un 76% tienen totalmente garantizado su dinero y el restante 24% de forma parcial.

El Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (CONASSIF) acordó, con base en el informe final de intervención a la Financiera Desyfin, que la entidad es inviable, por lo que se iniciará de inmediato el proceso de resolución.

Entre los principales hallazgos de la Interventoría, que confirman la inviabilidad, están:

- Ajustes en la información financiera y contable que al 31 de agosto totalizaron el monto de ₡17.015 millones. Entre los rubros ajustados están estimaciones crediticias, reversión de gastos registrados como activos, pérdidas por venta de bienes, sobrevaloración de activos y provisiones de pago de impuestos.

- Pérdidas por ₡21.968 millones, derivadas fundamentalmente por dichos ajustes.

- Pérdidas de la totalidad del patrimonio y un faltante de ₡6.704 millones, lo que representa una caída del 158% del patrimonio al 31 de agosto.

- Caída en la suficiencia patrimonial, la cual pasó de un 10,3% en julio a -10,7% en agosto.

Asimismo, la interventora de la Financiera, Marianne Kött Salas, detalló que una propuesta presentada por los accionistas mayoritarios durante una, asamblea no subsanaba las causas de la intervención.

Añadió que, los accionistas comunes votaron en contra de la capitalización y demás aspectos del plan de regularización.

Kött también apuntó que los problemas de gobierno corporativo se evidenciaron y deterioraron más durante el proceso de intervención.

Proceso de resolución

Para el proceso de resolución se conformará un primer bloque de activos de calidad denominado “banco bueno”, que se transferirá a una entidad solvente. Este representa el 75% de los activos de la financiera.

“A cambio, esta entidad solvente asumirá pasivos de la Financiera hasta el valor de los activos trasladados, monto que se determinará una vez que se lleve a cabo la negociación con la entidad interesada”, indicó la Interventoría.

Agregó que, durante el proceso una entidad interesada se acercó, y otras externaron su interés de participar.

El segundo bloque, conocido como “banco malo”, que corresponde a los activos que no adquiera la entidad financiera solvente, se traspasará a un fideicomiso para su venta en beneficio de los acreedores.

En caso de que la resolución propuesta no surta efecto o quede un remanente de activos, se procederá a subastarlos y venderlos de forma directa.

“En última instancia, los activos cuya venta no haya sido posible de concretar en el proceso de resolución, se enviarán al proceso concursal ante la instancia judicial correspondiente”, apuntó la Interventoría.

Por último, detalló que los depósitos de hasta ₡6 millones se encuentran totalmente garantizados, independientemente del mecanismo de resolución o liquidación que se aplique.

Las personas con depósitos garantizados y no garantizados en la Financiera son 4.028, de las cuales un 76% tiene totalmente garantizado su dinero y el restante 24% de forma parcial.